I. Libros, palabras, juegos, creatividad, armonía, confianza, encuentro. Viajo hasta San Lorenzo de El Escorial. Al abrigo del monte Abantos un refugio para el encuentro: Una asociación de personas que comparten. Un taller de escritura creativa. Un espacio para crear. Surgen confianzas e intercambio. La tarde es cálida. Me reciben, les acojo. Fluyen versos, emociones, risas, ocurrencias, combinaciones.
II. Libros, versos, ilusión, ganas de compartir y co-crear, exploración, apertura. Viajo hasta Ávila, donde se celebra la Feria del Libro. El Ayuntamiento de esta ciudad ha organizado un programa diverso donde cuento con un espacio. El sol de abril calienta la tarde, las piedras, las montañas. En la cercanía del paseo vespertino, algunas personas se acercan, intercambiamos y creamos. Al rumor de al algarabía de ires y venires, escribimos poemas surrealistas, soñamos ilusiones, expresamos humos y amor; anhelos y deseos. Los picos Zapateros presiden el orgullo del punto más al Este. La sierra de La Paramera suaviza las formas. Serrota impasible espera la elipse del astro sol. Al oeste, el Valle de Amblés permanece de quietud y constancia. La plaza del Mercado Grande nos acoge bajo una carpa. Lo que nos surge es bienvenido. Hay descubrimientos, sorpresas, combinaciones y transformaciones.
Gracias a tod@s las personas que han participado en ambos talleres. Por el viaje interior que conscientes o no, han realizado con su forma de crear, enriquecerse, compartir y aportar en los universos del encuentro y las relaciones humanas. Y por acercarse y disfrutar de la escritura y la Poesía.
©Yolanda Jiménez (texto)
©Juan Peláez (fotografías)