Es alegre esta melodía
descubierta en un libro del desván,
junto al pincel ajado de alguna reflexión.
Es extraña la tonalidad de la pared,
como un color inventado,
como un rostro de ladrillos abandonados.
Al otro lado de la sombra,
hay un lucido muro
y una fachada hermosa
en la mitad del bosque,
quizá dormido de hechizos.
©Yolanda Jiménez.
Sep 16, 2020 @ 20:24:07
Muy bueno