Una banda de músicos con mayúsculas; de esos que disfrutan multiplicando acordes, intercambiando melodías, compartiendo creatividad. Personas. Energía… Sobre el escenario un espacio abierto a compartir, a vibrar, a acoger lo que surja. Solo son hombres. Hombres con ganas de crear, de transmitir. Acarician sus instrumentos en sutiles roces de dedos, de labios, de emoción…
El ambiente cálido abrazó tanta belleza. Surgió la magia de conexiones intensas. Almas sensibles y emociones liberadas inundaron mi sentir. Contagiado de alegría, el público vibra. Hay una reciprocidad, un intercambio entre el dar y el recibir. Un momentazo precioso.
Gracias a los músicos de L´Rollin Clarinet Band por regalarnos tanta belleza con vuestro mejor hacer. Disfrutar de vuestros conciertos es una experiencia de deleite, más allá de los sentidos.
Yolanda Jiménez